¿Cómo invertir en tecnología para mi negocio?

Enrique se ha lanzado a la era digital… o eso cree. Ha contratado (es un decir) a un community manager y ahora tiene redes sociales. Ha creado una página web y ha llevado su servicio a la oferta online: antes se ofrecía solo en presencia, ahora también se puede adquirir online. Incluso en su página está la opción de suscribirse a una newsletter, y compró nuevo equipo para que el servicio que antes ofrecía solo a las personas que iban a su negocio también puedan recibirlo las personas desde casa. Enrique le presume a sus amigos que se ha digitalizado… ¡No tan pronto, Enrique!

O sea, ¿cómo? ¿Qué no quedamos en que la tecnología va primero? Este… nop

Cuando Enrique deja de presumir y habla con su tecnólogo de confianza (así le dice ahora a su guru, es decir, a su consultor), él lo felicita por seguir dando pasos hacia la digitalización. Como Enrique no es tonto se da cuenta… ¿cómo que pasos? Quiere saber. Su consultor le hace una serie de preguntas que lo hacen darse cuenta de qué es lo que sigue.

Primero, su consultor quiere saber cómo está eso de que ha “contratado” (así, entre comillas) a un community manager y Enrique, listo como es, le dice: —Esto te va a encantar: en lugar de pagarle a alguien ajeno a la empresa le pedí a uno de mis colaboradores que se hiciera cargo y ahora también genera contenido para las redes. El consultor (resistiendo las ganas de hacer una expresión tipo facepalm) le pregunta todavía:  

—¿Y quién se encarga del diseño editorial de ese contenido?

Silencio.

—¿Esa misma persona responde a los comentarios?

—Este… ¿comentarios? Es que más bien no hay…

—¿Y cómo miden qué tipo de contenido es el más efectivo? ¿Los post tienen un CTA?

—Ah, sí, la CTA… no, lo que pasa es que estamos trabajando en ella.

—En él.

—Sí, él está trabajando en eso.

(facepalm reprimido x 2) —Bueno, ¿cómo ha dividido sus funciones tu colaborador?

—¿Cómo dividido?

—¿Esta misma persona ahora trabaja más tiempo para dedicar a redes?

—No, más bien lo hace cuando le da tiempo (smiley).

 

         Luego, su consultor le pregunta quién está redactando la newsletter. —¿Redactar?— contesta Enrique —no, te digo que en la página uno se suscribe y ya. Después le pregunta cómo fue que se decidió a hacer dos productos, uno online y otro presencial. —Ah, es que no te expliqué— cuenta Enrique —eso es lo mejor: es el mismo producto, sólo lo puse disponible online, entonces no tuve que hacer nada, solo comprar equipo que permite acceder al servicio desde casa: la tecnología es lo más importante, ¿no?, ya lo entendí (smiley x2).

         Después, el consultor quiere saber cómo funciona su página, así que la busca en su celular. La página tarda en cargar y cuando lo hace no se ve bien. Se la muestra a Enrique. —Ah, es que necesitas abrirla desde la computadora, ahí sí se ve bien. —¿No la tienes programada también para móvil? —Pues sí, no, si no cómo se vería en tu cel ahorita (smiley x3). Silencio (facepalm reprimido x3).

La tecnología en el centro, pero junto a las personas

Su consultor le explica a Enrique que todos los pasos que ha dado son necesarios para digitalizarse, pero no significan que se haya digitalizado como tal. Le muestra, desde su celular, por qué su página web debería cargar rápido y ser también funcional en móvil (la mayor parte de las búsquedas nacen de ahí). Le enseña cómo su competencia también tiene una newsletter, pero cómo ésta genera una lista de correos (datos de contacto) y cómo genera contenido de valor sí para su cliente (le llegan artículos de su interés). Le hace ver cómo puede mejorar sus redes sociales (y Enrique se da cuenta de que necesita a alguien de tiempo completo para ello). Finalmente, Enrique mismo llega a la conclusión de que el mejor modo de aprovechar los recursos tecnológicos que ha adquirido sería generando un producto específico para lo digital a partir de su servicio físico. Y sobre todo aprender a que lo uno no esté desconectado de lo otro.

 

Si te pasa como a Enrique, que siente que ya ha invertido en tecnología, pero esta no le da los resultados que esperaba, no dejes de hacer nuestro assessment para entender en qué lugar estás y hacia dónde tendrías que ir.

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